Repetimos en este local, que ya habiamos visitado hace un tiempo. Reseña aquí.
Local agradable, buena decoración, servicio muy amable y mantelerias de papel con servilletas de tela. Menú de fin de semana por 18 €. Tres primeros y tres segundos con un vino joven en añada. Todo muy bien preparado, calidad alta y cantidad normal (no es de los que sobra comida en el plato). La carta variada y precios correctos, en la media.
Nosotros probamos la sopa de marisco (dejan la perola) y las coliflores rellenas de carne. Calidad y sabor de nueve. Como segundos decidimos probar la merluza y el codillo. De nuevo de nota sobresaliente en preparación, calidad y sabor.
Los postres probamos unas peras al vino y brazo de gitana con nata. En la línea de lo anterior.
En esta ocasión nuestra nota llega a un notable, un ocho. Un lugar para repetir y recomendable si se está por la zona. En invierno los menús son más elaborados, al no tener la clientela fija del turisteo veraniego…volveremos a probarlos.