Volvimos a Grado, una villa con muy buena oferta gastronómica y un gran ambiente de mercado, los domingos.En las afueras, en la aldea de Sestiello, se encuentra el hotel rural/restaurante El Lacayo. Se llega desde la salida este de la autovia, enlace Sestiello y Grado.
http://www.ellacayodesestiello.com/
El local es precioso, con un comedor muy cuidado y el personal muy eficiente, amable y uniformado (excepto el dueño)…sin queja. Mantelerias de tela y cambio de cubiertos. Las vistas desde el comedor preciosas a través de un gran ventanal. Dispone de una pequeña terraza delantera donde nos tomamos un café.
Probamos el menú de 24 euros. Cuatro primeros y cuatro segundos.
Los platos elaborados y bien cocinados. Los primeros simplemente bien, cantidad justa (para ser Asturias) y el producto normal. Por ejemplo una fideua de calamares negros..los calamares eran de lata, un cinco. La lasaña de verduras bien de sabor, pero escasa en cantidad, un siete. La ensalada de ahumados lo mejor, de notable alto.
Los segundos, carnes y pescados, mejoraron en cantidad, buena calidad y en su punto…de notable alto.
Los postres muy bien (de 9), estamos en Grado y eso se nota.
El vino era un joven muy dulce, pero fue servido en una jarra (en plan menú de 8 euros)..un mal detalle para un menú de 24 euros. Por ese precio deberían poner un roble (ya no digo un crianza) y servirlo en su botella. estos detalles hay que cuidarlos más.
Creemos que es un buen local, pero intentan dar una imagen superior a la que realmente tienen. Aspiran a más dando algo menos. Si el menú fuera de 18 euros sería un lugar de 9. Por este precio-calidad un 6,5. Un pequeño impulso y estarán arriba.