En esta ocasión nos hemos acercado a un LLagar, un restaurante-sidrería donde elaboran su propia sidra. esta situado en las cercanías de Mieres, en la aldea de Espineo, a unos tres kilómetros del casco urbano por una estrecha y preciosa carretera con vistas a todo el valle del río Caudal.
El local es el LLagar de Panizales. Ojo , no está en la aldea de Panizales, sino que está en la aldea de Espineo.
http://www.llagarpanizales.com/
El restaurante ha sido arreglado recientemente, antes era el típico bar asturiano, ahora luce muy bien, limpio y decente. Dispone de una buena terraza, comedores acristalados y unas bonitas vistas en plena naturaleza. Un lugar ideal para tomarse una sidra en un ambiente típico asturiano y donde se puede comprar buena sidra (marca Panizales, obviamente) a buen precio directamente al fabricante. Las mesas con mantelerias de papel, el servicio correcto y muy amable, típico de un bar de pueblo. La cocina es casera, que nadie espere florituras. La carta está bien, amplia con unos precios normales, no es barato. Las carnes guisadas y los arroces son su especialidad.
Nos decantamos por probar uno de sus arroces, en nuestro caso arroz con marisco, bacalao y cocochas. La cantidad muy abundante, pueden comer tres o cuatro personas con la ración para dos (36 euros). La preparación correcta (recomendamos reservar para que lo tengan al punto) aunque su sabor es el clásico del arroz hecho por nuestras abuelas. Si buscas ese tipo de cocina, aquí has acertado. Le damos un siete al arroz,ingredientes buenos y de calidad, aunque algo elevado el precio.
La sidra Panizales muy buena, la cosecha d e este año ha sido excelente, merece la pena probarla. como postres pedimos la tarta de dos chocolates, la tarta de turrón y la tarta María Luisa…de diez en los tres casos…buenas cantidades, todo casero y un sabor espectacular.
Resumiendo…un local enclavado en la naturaleza, una sidra muy buena y la comida casera y correcta. Lo recomendamos para pasar la tarde degustando sidra y para los muy aficionados a los arroces y guisos de casa. Nuestra nota un seis.