Restaurante-asador en la carretera que lleva al Monte Naranco en Oviedo. Arriba nos esperan unas maravillosas vistas de buena parte de Asturias (Los picos de Europa, la Cordillera Cantábrica y la costa de Gijón y Avilés. Un buen lugar para detenerse a tomar un refresco o una sidra en su terraza. La dirección: Av. de los Monumentos, 21, 33012 Oviedo, Asturias. Teléfono: 985 11 76 92
El local está muy bien decorado en piedra vista, limpio, acogedor y agradable. El servicio es joven, amable y muy correcto. El dueño del local muy simpático. Mantelerias de papel, la presentación y emplatado está cuidado.
Tienen carta de raciones a buen precio y cantidades normales, está bien para picar algo.
Nosotros nos detuvimos a probar su cocina. Disponen de un menú semanal por 10 e y de finde por 16. Tres primeros, tres segundos, postre y bebida.
Nos decantamos por una ensalada y pasta con setas. Como segundo probamos el cachopo que incluía el menú, de tamaño menor que el que se ofrece en la carta (cosa lógica por otro lado) En general la comida es correcta, nada que destacar, preparación normal y cantidades normales. Presentación y atención buenas. La comida no es de lo mejor que hemos probado, pero aprueba. Calidad-preparación-cantidad un siete. Los postres de notable, sabrosos y cantidad correcta.
Aunque viajamos en moto, solemos pedir agua y vino para comer. La idea es probar el vino para dar nuestra opinión, ya que en nuestros ratos libres algunos somos aficionados a la cata, moderada, del producto de la uva. En este caso el vino que incluye el menú es un cosechero normalito, que debe ser consumido con casera obligatoriamente. Es quizás el punto débil del menú, ya que por 16 euros deberían haber añadido un vino de mejor calidad (un joven o un roble son nuestra recomendación). Con un vino cosechero consideramos que el precio del menú es alto, sería adecuado con un vino de mejor calidad.
Nuestra nota general un 6,5. Local correcto, buen ambiente, servicio bueno, comida normal, pero consideramos la calidad-precio no es la adecuada, por lo menos en el menú de fin de semana.