Nueva ruta invernal, aunque en un día con temperaturas agradables, por la zona de las sierras costeras de Cudillero. Desde Somao/Somado en Muros del Nalón embocamos la AS 352 hasta la Quintana donde nos desviamos por una preciosa carreterilla local, la CU-5, que nos lleva hasta un curioso cruce de seis carreteras comarcales, donde debemos escoger la que nos lleva a Faedo por la CU-4. Desembocamos en la antigua N-632 y circulamos unos kilómetros bajo los enormes viaductos de la nueva autovía, hasta llegar a Soto de Luiña…donde en vez de dirigirnos a la playa cogemos la CU-7 hacia Folledo. Carretera estrecha y bien asfaltada hasta la mitad, después pasa a estar más delicada con humedades y gravilla (circular con precaución).
A la altura de una ermita y una fuente llegamos a un vial en buen estado (antes de Folledo), desviándonos a la derecha para encarar una subida por una estrecha carretera en perfecto estado que va cumbreando la serranía paralela al mar hasta llevarnos a la ermita de San Roque de Ballota, donde tenemos unas espectaculares vistas de la costa asturiana.
Desde aquí un descenso pronunciado nos lleva de nuevo a la antigua N-632 y tomamos dirección al Cabo Vidio y Puerto Chico (precioso puerto marisquero). Curveando pegados a la costa y pasando por pequeños pueblos turísticos, muy tranquilos en invierno, llegamos a Oviñana donde comeremos.
En esta ocasión nuestros estómagos se asentaron en el restaurante El Único, de Oviñana. Un local construido a modo de chalet, con una terraza muy agradable y un poco de pradería. Disponen de un menú de fin de semana a 14 € y una pequeña carta con carnes y pescados. Mantelerías de papel, local limpio y servicio muy simpático y amable. Nada que objetar.
Nosotros probamos un poco de todo. Chicharros, carne en rollo, pote, ensalada de arroz, gallo a la plancha y un cachopo de la carta preparado con el relleno por encima y no dentro como es habitual en Asturias. El vino del menú un cosechero correcto, sin más.
Todo muy rico, buenas cantidades, bien preparado y sabroso. Los postres caseros muy correctos.
Local muy adecuado si se encuentra uno por la zona. Precios justos y buena comida para lo que se estila en esta zona turística de la costa asturiana. Nuestra nota un siete.