Aprovechando un día soleado nos dirigimos al Puerto de Pajares, tradicional paso entre Asturias y León con su maravilloso puerto repleto de curvas y preciosos paisajes. En la linde provincial se alza el antiguo Parador Nacional de Pajares, inaugurado en 1953, con una arquitectura alpina impactante. En 2004 cerró sus puertas y a finales de 2017 fue reabierto por un empresario menorquín que ha tenido que cambiarle el nombre (ya no es Parador Nacional) y llamarlo “El Mirador de Pajares”. Debajo un video de su inauguración:
Gastromoto en Santander. Marisqueria El Marucho.
Aprovechando unos días moteros por Cantabria, pernoctando en su capital, Santander, me acerque a tapear algo por la zona del antiguo barrio de pescadores de la ciudad: Tetuán. Allí se encuentran tabernas de las de toda la vida, donde te sirven un aperitivo con la consumición (en el resto de la ciudad se paga por ello) y disponen de una buena variedad de pescados y mariscos a precios para todos los gustos.
El Marucho es una de esas marisquerías-restaurantes donde se puede tomar un bogavante y también tapear en barra. A los aficionados a la carne siento decepcionarlos porque aquí no encontraran nada que les haga tilín, solamente se vende producto fresco y de la mar. Está situado en la Calle Tetuán 21.
El local es un bar de pescadores de toda la vida, decoración agradable, pequeño (no reservan mesa), limpio aunque apretado. Mantelerias de papel, aunque la servilleta es de tela. El servicio es muy amable y eficaz.
Degustamos productos de su carta:
Unas rabas de calamar (ración 11 €), un producto muy típico de Santander. Calidad y sabor de nueve.
Unas albóndigas de rape (14 €), plato original, muy sabroso y en su punto. De nueve.
Lubina a la plancha (20 €), plato de los de toda la vida, buena ración, bien preparado, con patatas cocidas y ensalada. De notable.
Todos los productos frescos, buena calidad, nada de aceite requemado, todo perfecto. Un local para repetir si se quiere comer buenos pescados a un precio módico. Nuestra nota un ocho en relación calidad-precio.
Tapeando en Santander. Marisqueria La Mulata.
Aprovechando unos días moteros por Cantabria, pernoctando en su capital, Santander, me acerque a tapear algo por la zona del antiguo barrio de pescadores de la ciudad: Tetuán. Allí se encuentran tabernas de las de toda la vida, donde te sirven un aperitivo con la consumición (en el resto de la ciudad se paga por ello) y disponen de una buena variedad de pescados y mariscos a precios para todos los gustos.
La Mulata es una de esas marisquerías donde se puede tomar un bogavante o un arroz y también tapear en barra. Esta opción fue la escogida por mí. Está situada al comienzo de la Calle Tetuán, tel. 942 36 37 85
Degusté unas sardinas y unas croquetas de cachón (sepia) exquisitas. Bien preparadas, sin aceite y de calidad. El precio normal.
Para comer dispone de una buena carta de pescados y mariscos. Los precios a la carta son justos, calidad de los productos alta y el servicio muy amable. Elcomedor es un local muy marinero, mantelerias de tela y ambiente de marisqueria bien puesta. Recomendables las rabas de calamar (de 9,5), croquetas de cachon (sobresalientes) y cualquier pescado. Lo que está fuera de carta recomiendo preguntar el precio, puede ser elevado. Lugar muy recomendable para tapear y sobre todo para comer buen pesacdo a precio justo en un elegante comedor.
Nuestra nota un ocho.