Aunque no pernocte en el parador no me resisto a dejar mi opinión sobre su restaurante, donde comí al mediodía. Un menú del día por 15 e muy bien preparado, calidad en los ingredientes y un servicio muy cuidado. Todo de 10. La fideua marinera seguramente la mejor que he comido, unos fritos de merluza muy ricos y con pescado de calidad y una macedonia que no me pude acabar de lo contundente(por buena) que estaba. El marco y la comida merecen una visita en esta ciudad anclada en un pasado antaño esplendoroso. Relación calidad precio muy buena. Volveré.