Estuve comiendo un fin de semana en la Mina de Colloto. La decoración imitando una mina está muy original y cuidada. Los camareros vestidos de mineros y el bar está muy bien, moderno y limpio.
Dispone de unos menús a precio cerrado estilo menú del día que no están mal, pero que al ser cerrados la posibilidad de elección es nula. La comida es buena, buena calidad, presentación y preparación, la cantidad es justa para mi, pero no sales con hambre.
El servicio muy correcto y eficiente. Los precios son normales, no es caro pero no es barato.
Un lugar aceptable para comer bien. Le pondría un siete de nota como nota promedio.