Nuestra ruta semanal terminó en Noreña, una pequeña villa del centro de Asturias con una zona central repleta de sidrerías y cafeterías con unas apetecibles terrazas para tomarse algo.
Nosotros decidimos comer en la sidrería el Guarapu, situada frente al apeadero de FEVE de Noreña. Es un local moderno, bien decorado y aparentemente limpio, aunque dentro había bastantes mosquitos, lo que nos hace dudar un poco de lo anterior.

Aun así decidimos probar el sitio. La carta es variada, precios un par de euros por encima de la media. El servicio amable, aunque parece que la casa solamente sirve sidra si la escancian ellos y no disponen de los taponcitos para el escanciado por el cliente (algo opcional que suele ser normal para los que no nos gusta beber gran cantidad de sidra y que no necesitamos el escanciado manual). Nosotros, al ser mañosos hicimos uno con un corcho y una navajita, como se ha hecho toda la vida en Asturias. Un mal detalle para el cliente, ya que da la sensación que el único objetivo de esta medida es cebar al cliente a sidra y vender botellas. Esto lo señalo para los turistas o personas poco familiarizadas con las sidrerías asturianas. Tenemos que reconocer que es el primer lugar donde nos pasa.
Sobre la comida determinamos compartir unos chipirones a la plancha encebollados (12€) y unas croquetas caseras de jamón (10€). Las dos fueron unas raciones abundantes y de buena calidad-sabor. Quizás las croquetas mejores que los chipirones, pero los dos de notable.


Como platos principales nos decantamos por un entrecot (22€), una paletilla de lechazo (24€), bacalao a la parrilla (22€), bacalao al pil pil (22€) y bacalao rebozado en maíz (22€). Las carnes correctas, aunque la parrilla era de gas y no de leña, por lo que el sabor no es el mismo, pero buenas raciones. Los bacalaos muy buenos, raciones grandes, buena guarnición, aunque el bacalao al maíz un poco seco (habitual al estar rebozado).





En general buenas raciones, preparación buena y calidad de notable, pero parrilla de gas y precios muy altos para la calidad-servicio del local. La factura salió por 35€ persona. Nuestra nota general un cinco, aunque la comida podría tener un notable bajo. No recomendamos el lugar.
