En la zona de Ibias, esa gran desconocida del occidente asturiano, nos detuvimos en una de nuestras rutas siguiendo los puertos del Narcea (Pozo de las Mujeres Muertas, Valvaler, Tormaleo y el Rañadoiro), un viaje circular de una jornada muy recomendable, que pasa por carreteras solitarias que rodean el mayor robledal de Europa, el Bosque de Muniellos.
Para comer nos decidimos por el Mesón Eiroa en Ibias. Bar-tienda con el restaurante situado en la primera planta (mejor preguntar porque no está muy clara la situación). Está decorado en plan rustico asturiano, en piedra y madera, muy coqueto.
Disponen de un menú de diario de 12 € (los findes 18), con tres primeros y tres segundos. La comida es casera y las raciones tirando a grandes. Servicio amable y correcto. Buenas cantidades y preparación sin nada malo que reseñar. Un local recomendable si se está por la zona, quizás el mejor en calidad-precio-presencia del pueblo. Nuestra nota un seis.